5/5/08

La vida del delegado

La vida del delegado de clase, al menos en Medicina, no es nada agradable, y lo digo por experiencia.

Invariablemente, cuando entras por la puerta a las nueve de la mañana una marabunta de gente comienza a martirizarte con preguntas que buena falta te haría una bola de cristal para poder responder, como es la típica “¿qué día sale la nota del examen de…? [Insertar asignatura]. Pregunta que se irá repitiendo a lo largo del día hasta que se acaben las clases. Llega el momento en el que quieres decir “pero criatura, ¿crees que mantengo algún tipo de relación erótico-afectiva con el profesor que me permita poseer cierta información?”

Después está el famoso “qué e-mail”. Llegas a casa después de unas horitas de biblioteca y te dedicas a informar a la gente de las nuevas. Ya podéis imaginaros la frustración al día siguiente cuando dices algo como: “como ya os dije ayer en el e-mail”, y suena un casi (mi novia sí los lee) unánime “¿QUÉ E-MAIL?” Momento en el cual maldices hasta a la primera generación de la mayor parte de la clase.

No podemos olvidarnos tampoco del “es tu obligación” o su variante “para eso eres el delegado”, según los cuales se justifica que cada una de las personas de la clase te pida un favor surrealista, que más se parece a un capítulo de alguna obra de los escritores del Realismo Mágico, que a una petición de orden académico.

En fin, la vida del delegado está llena de sexo, no paran de joderte, te la quieren meter doblada siempre, y eres el presunto amante de la mitad del profesorado (la otra mitad te tocará en el siguiente cuatrimestre).

7 comentarios:

Frank Lhermitte dijo...

Sin olvidar que a partir de que te elijan delegado ostentarás el cargo de "Secretario personal de los agonías de la clase". El número de teléfono de tu casa se pasará más que un porro en una discoteca de adolescentes.

:-)

Menelwen dijo...

Totalmente d'accord

Anónimo dijo...

Cuánta razón tenéis!

Unknown dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Anónimo dijo...

es como si lo fuese escrito yo mismo... ufff, nunca mais

Anónimo dijo...

Me da miedo decirlo por si me comeis pero en fin, hay ratos que es una putada llevarlo todo pero dentro de lo que cabe en mi caso no suelo tener problemas, se lleva bien, por ahora...jaja

Anónimo dijo...

Tienes razón pero entonces...no te ofrezcas como delegado y depués vayas de mártir.